.
.
.
Yo
no me enamoré solo de ti,
también me enamoré
de:
tu boca,
tus dientes,
tu lengua,
tu forma de ver el mundo y mostrarlo diferente,
tu poto,
tu tetas,
tu lunar chiquitito,
tus pies,
tu cintura,
tus margaritas que se forman al reírte,
tu pelo,
tu naricita chistosa,
tu manera de hablarme y hacerme sentir parte de algo,
tus manos,
tu cuello,
tus orejas,
tu mirada y la manera que me pierdo en ella,
tus pestañas,
tu guatita (que obviamente no existe, pero igual me gusta),
tus piernas,
tu risa que abunda en todo y llena cualquier espacio,
tu piel,
tu sudor que me emborracha,
tu abrazo cálido y seguro.
Me enamoré de tu idioma entraño cuando despiertas,
de cómo puedes ser tan fuerte siendo que te veo tan delicada,
como verás, no me enamoré solo de ti,
me enamoré de ti en su conjunto.
.
.
.
.
.
.
Como sería sentir de nuevo el frio de tus dedos
tenerte acurrucada, iluminándome la noche
apareciendo, detrás de la escalera, como un
mendigo al que le han negado la dicha de la
muerte a los recuerdos dejados por tus besos
y paseo por la plaza, tomo la micro y vuelo
cambiando por dos botones, una linterna, el ruido
añejo de una vitrola que palpita tus siete
mandamientos, señales, a ti te busco en cada puerto
cuando distingo una chica que me gusta en la 403
te veo en el respaldo de una silla, cuando me
siento a meditar contigo y las hormigas, y
esa cortina de humo donde me escondo
y sigo buscando huevaditas en el suelo, en el baño, en la cama
donde las lagartijas no duermen, donde los
elefantes no respiran, porque no tiene sentido
sobrevivir al abandono cerrado de tu sexo
de tus piernas / de tus muslos / dejar tu lengua / abandonarme
sentir que sobrevives a las agujas del reloj, al
desprecio del tiempo, a la animalidad del sexo
cuando no estoy contigo, a la duplicidad de un
orgasmo, cuando no descansas y lloras sobre mi
.
.
.
.
ojala escribirte fuera tan fácil
como besarte
atragantarme de ti
lamerte la guatita
dejarte unos chupones
hacerte reir
tenerte en mis latidos
retener tu aroma
saborearte entera
(desde tu saliva hasta esos fluidos calentones)
ojala escribirte fuera tan fácil
como dejar de ser yo por un ratito
pasar a ser la yema de los dedos
y sentirte estremecerte a mi contacto
ser para ti una frazada calentita
un poncho de lana
el viento que se cola
ese que te para los pelitos
(pero abrigarte)
ojala escribirte fuera tan fácil
nadar por las palabras y encontrarte
mordisquearte las tetitas sin culpas
saberme el culpable de tus gemidos
perderte en las palabras
y en los actos
y encontrarte
y besarte/atragantarme/lamerte/chuparte/hacerte reir/tenerte y retenerte/poder saborarte/perderme y encontrame/ojala escribir fuera así de fácil
como desearte
.
.
.
ojala escribirte fuera tan fácil
como besarte
atragantarme de ti
lamerte la guatita
dejarte unos chupones
hacerte reir
tenerte en mis latidos
retener tu aroma
saborearte entera
(desde tu saliva hasta esos fluidos calentones)
ojala escribirte fuera tan fácil
como dejar de ser yo por un ratito
pasar a ser la yema de los dedos
y sentirte estremecerte a mi contacto
ser para ti una frazada calentita
un poncho de lana
el viento que se cola
ese que te para los pelitos
(pero abrigarte)
ojala escribirte fuera tan fácil
nadar por las palabras y encontrarte
mordisquearte las tetitas sin culpas
saberme el culpable de tus gemidos
perderte en las palabras
y en los actos
y encontrarte
y besarte/atragantarme/lamerte/chuparte/hacerte reir/tenerte y retenerte/poder saborarte/perderme y encontrame/ojala escribir fuera así de fácil
como desearte
Suscribirse a:
Entradas (Atom)