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Partir
y tomar del espacio
algún instante, minúsculo,
y expandirlo,
ajeno a las distancias.
Consensuar las opciones
y crear
de nuevo al arrebol
y llamarlo
(otra vez)
con tu nombre.
Mirar y sentir
que en ese ínfimo instante,
que tomé del espacio y curvé para ti,
estoy ajeno en todo
a las distancias abismales
que hay
entre tu aliento
y el mio.
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1 Coments:
ahora que lo leí acá, lo entendí distinto a cuando me lo mostraste en la libreta, y pienso que el último "qué" queda mejor sin tilde.
eso..
me parece un poema muy melancólico.. me da pena, no quiero pensarlo mucho :(
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